
Cuando cae la noche en Cuba, no siempre es por elección. A veces, el apagón llega antes que el atardecer. Y no es metáfora. Este fin de semana, el país se sumió (otra vez) en la oscuridad, no de las ideas —esa lleva tiempo instalada—, sino la física: Cortes eléctricos que no dan tregua ni descanso. El enemigo, esta vez, no es tan invisible. Tiene nombre: Déficit eléctrico de 1766 MW, con apellido: crisis estructural.
Pero no, no se trata de un “evento aislado”. Ni de “condiciones climáticas adversas”. Ni de “un sabotaje imperialista de última hora”. Es la misma historia que ya nos sabemos de memoria. O que preferimos olvidar, como una canción que suena demasiado en la radio: Un sistema colapsado, que se cae a pedazos aunque nadie lo empuje.
¿Quién decidió que un país podía funcionar así?
No fue un rayo lo que apagó la unidad 1 de Felton ni una protesta ciudadana lo que desconectó la unidad 5 de Nuevitas. Fueron las averías. El mantenimiento eterno. La falta de repuestos, de combustible, de planificación. ¿De responsabilidad? Eso parece fuera de servicio desde hace años.
El Sistema Eléctrico Nacional (SEN) arrastra un historial digno de telenovela trágica. Este sábado se registró una afectación ininterrumpida durante 24 horas. El clímax llegó a las 8:50 p.m., con un déficit de 1678 MW. Para quienes no manejan megawatts como si fueran pan, eso significa que más de la mitad del país pudo haber estado a oscuras en simultáneo. Las cifras hablan, pero el pueblo grita.
Y si usted piensa que el domingo trajo alivio, piénselo de nuevo. A las 7:00 a.m., la disponibilidad energética era de apenas 1450 MW frente a una demanda de 2500 MW. Es decir, faltaba más energía de la que había disponible. Para la noche, la situación se proyectaba aún peor, como si el infierno también funcionara con petróleo cubano: Se esperaba una demanda de 3350 MW y una oferta que apenas rozaba los 1654 MW.
¿Dónde se genera tanta desesperanza?
En 77 centrales apagadas por falta de combustible. En 54 MW que se perdieron en la Patana de Regla. En 82 MW más que no funcionan por falta de lubricantes. En parques solares que, con suerte, aportan 923.6 MWh al día, un suspiro frente al incendio.
El problema no es técnico, es político. No es de hoy, es de hace décadas. No es de una planta, es de todo un sistema que se niega a renovarse. Que le teme al sol tanto como a la transparencia. Que maquilla cifras mientras la gente improvisa cenas con velas, no por romance, sino por necesidad.
Y mientras tanto, ¿qué hace el ciudadano común? Se refugia en el sarcasmo, el ingenio y la paciencia. Hasta que la paciencia también se va. Como la luz.
Se deterioran los alimentos, los medicamentos, la calma. Se detiene el transporte. Se desconecta la vida. Se pierden horas, días, ganas. Y sí, también se acumulan las quejas: en redes sociales, en conversaciones susurradas, en miradas que dicen lo que ya no se puede escribir.
¿Y el gobierno? Informa. Explica. “Hace esfuerzos”. Pero el esfuerzo sin resultados es como un generador sin combustible: Ruido y calor, pero nada de luz.
Cuba no está solo apagada. Está en pausa. Está estancada en un bucle donde cada intento de solución es otro parche sobre una red eléctrica hecha de cables, humo y promesas viejas. El futuro no se ve porque no hay linterna que alumbre lo que no se quiere reconocer.
¿Y tú, qué harías si cada noche tu país te apagara la vida sin pedir permiso?
Fuentes verificables:
Déjanos tu opinión en los comentarios. ¿Crees que esta crisis energética es solo un síntoma… o la enfermedad misma?
Más informaciones:

¿Dios elige… o solo votan los viejos con sotana?

¿Quién apagó a Cuba? La isla que se quedó sin luz… y sin excusas

¿Tu iPhone Secuestrado, Tu Vida Digital Recluida? Cuando Apple Cierra la Celda de Tus Recuerdos.

¿Victoria Humana o Derrota Tecnológica? La Verdad Incómoda Tras la Carrera de Robots en Beijing

¿Y si el último héroe ya no quiere salvarnos? La despedida incómoda de John Cena
En la tienda:
-
Camiseta lalalatv hombre
₡12200 – ₡13700 Seleccionar opciones Este producto tiene múltiples variantes. Las opciones se pueden elegir en la página de producto
